La novela narra la vida de Solimán, un niño nacido en Trípoli, hijo único de un matrimonio bien situado económicamente. Su padre, un hombre de negocios habituado a viajar, se opone a la dictadura instaurada por Gaddafi -el Guía- y apoya las revueltas en favor de la democracia. En 1979 es detenido y el niño queda solo con su madre, que inicia tratos para que el marido vuelva a casa. Cuando llega, físicamente destrozado por la tortura, envía a su hijo a Egipto para evitarle crecer en un país oprimido, aun sabiendo que, al menos en mucho tiempo, no podrá regresar.
Me ha parecido una historia interesante y bien contada. Desde muy pequeño, Solimán, descubrirá el significado de las palabras "traición", "violencia" o "perdón".